jueves, 25 de abril de 2013

Teléfonos retro de Wild & Wolf, llamada a la tentación.

Asumiendo que lo retro y lo vintage hace tiempo que volvieron para quedarse, no queda otra que dejarse seducir por esos encantadores diseños del siglo pasado y descolgar la llamada de la tentación en estos teléfonos retro de Wild & Wolf.

Quizás el más llamativo de todos sea este Scandiphone de corte marcadamente futurista, con la botonera en la base. No sé cuán cómo de usar será, pero vistoso es un rato largo.
En esa misma línea se encuentra el modelo Trim, que está disponible en un sinfín de colores muy de los años 70, como el naranja, el azul turquesa o ese verde indescriptible que es el de la foto, por mencionar algunos. Tiene un diseño menos vistoso, pero es igualmente todo un icono.
No obstante, si lo que estamos buscando es un auténtico icono, en este caso del diseño americano, nada como una reproducción basada en las cabinas telefónicas de los años 50, de esas que el teléfono se colgaba en un lateral y tenían una ranura diferente para cada moneda.
Si, por contra, lo que tienen en mente es un teléfono sobrio y elegante, que no busque el protagonismo pero que inevitablemente capte las miradas de los presentes, les recomiendo el Dreyfuss 500, preferiblemente en negro, aunque también está disponible en cromado.
Para los verdaderamente nostálgicos, la elección inevitable debería de ser el modelo Princesa en color crema. Creo que muchos recordarán este como uno de los teléfonos supletorios más habituales en casa, ese por el que todo adolescente suspiraba cuando ni los SMS ni por supuesto el Whatsapp habían hecho acto de presencia.
En cambio, para el recibidor, en uno de esos muebles para el teléfono tan propios, lo normal era tener un modelo más respetable y con presencia, como por ejemplo el 302, todo un clásico, aunque para clásico, clásico, el Lobby Phone. Lástima que esté solo en plateado, lo que le añade efectismo y le queda realismo.
Como pueden imaginar, todos los modelos han sido adaptados a las líneas modernas, por lo que se ha sustituido la habitual rueda por una botonera. Quizás se pierda parte del encanto, pero así, además de funcionar, no tenemos que maldecir aquellos números con muchos ceros y nueves, que aquello era un nunca acabar.
Para más información visiten: Wild & Wolf
Vía: Decoesfera

No hay comentarios:

Publicar un comentario