En la ciudad sueca de Gotemburgo se encuentra este coqueto y acogedor apartamento femenino, una vivienda de unos 60 m2, con la cocina abierta al salón una decoración de estilo escandinavo que recrea ambientes modernos y cálidos. Las paredes pintadas en blanco, color luminoso por excelencia, y el suelo de lamas de madera en acabado natural, además de aportar continuidad, son el fondo ideal para los muebles de diseño actual. La base neutra se complementó con detalles y tapicerías en tonos negros, azules y rosas, una combinación ideal para conseguir ambientes femeninos, elegantes y acogedores.
La zona de estar, muy sencillita, se decoró con un sofá en tono azul grisáceo, igual que la alfombra y mobiliario actual en color blanco: una mesa de centro, la estantería y un mueble de dos puertas justo debajo del televisor, pegado a la pared.
Si bien la cocina está abierta al salón se buscó dotarla de cierta autonomía visual,es decir, recurrir a soluciones o recursos decorativos para separarla visualmente. En este caso, el comedor de diario ayuda a lograr este objetivo.
A la hora de decorar la cocina, se cuidó que armonizará con el salón para formar un conjunto equilibrado y armónico, pero al mismo tiempo, se le quisó dar cierto protagonismo con las sillas Eames Plastic Side Chair en negro. Una cocina abierta al salón está expuesta a la vista de todos: debe mantenerse siempre limpia y ordenada.
Desde este coqueto y acogedor rincón de descanso, y a través de una puerta corredera, se accede al dormitorio. El sillón y el reposapiés, que recuerdan a la serie Poang de Ikea, son diseños del arquitecto y diseñador finlandés Alvar Aalto, uno de los primeros y máximos representantes del diseño nórdico.
El dormitorio, con su chimenea y todo, es un ambiente sereno, tranquilo y acogedor, decorado en tonos blancos, grises y rosas. Los muebles blancos se combinaron con piezas negras, y la pared que queda libre entre la cama y el armario se aprovechó para crear una pequeña zona de trabajo con una mesita de escritorio y una silla de Vitra, ambas en color negro. Son los pequeños detalles y complementos los que aportan el toque femenino a la decoración.
Fotografías: Alvhem Mäkleri
Vía: decoratrix
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